Tiroteo ensombrece festejo en Kansas City

El Supertazón es el evento más unificador en Estados Unidos, que esta alegría se convierta ahora en trage-dia hiere profundamente el alma estadunidense, expresó el presi-dente Joe Biden tras el tiroteo durante la celebración del campeonato de los Jefes de Kansas City, que de-jó un muerto y 21 heridos, entre ellos ocho menores.

Es tiempo de actuar. Le pido al país que me apoye. Para hacer oír su voz en el Congreso y prohibir las armas de asalto, limitar los cargadores de alta capacidad, fortalecer las verificaciones de antecedentes y mantener las armas fuera del alcance de quienes no tienen por qué poseerlas, agregó.

Otra vez en Kansas City. Otra vez, las armas de fuego manchan una celebración deportiva. Los festejos por la victoria derivaron en un episodio de sangre en una zona donde poco antes los jugadores habían saludado a los aficionados.

La policía local informó que tres personas fueron detenidas en un día en el que se esperaba alrededor de un millón de personas y un despliegue de 800 agentes. De acuerdo con la información preliminar, las autoridades descartan que se trate de un atentado.

A bordo de autobuses de dos pisos, el equipo recorrió la ciudad, donde cientos de miles festeja-ban en una majestuosa marea roja, el color del uniforme de los Jefes. El final de ese desfile fue caótico. Estallidos como petardos por el tiroteo y la multitud que corría despavorida para cubrirse.

Oí entre 15 y 20 disparos

Pensé que eran fuegos artificiales. Oí entre 15 y 20 disparos en un lapso muy breve, declaró John O’Connor al diario The Kansas City Star.

Las zonas que habían estado atestadas de aficionados quedaron vacías tras el tiroteo, con policías y bomberos en un área acordonada.

La policía señaló que tres personas fueron detenidas tras el incidente que tuvo lugar cerca de la estación de trenes Union Station, donde momentos antes los ju-gadores del equipo saludaron a los fanáticos.