Nicolas Sarkozy sentenciado a prisión por financiación ilegal de campaña

En un revés sin precedentes, el expresidente francés Nicolas Sarkozy fue condenado este miércoles a seis meses de prisión firme y otros tantos exentos de cumplimiento en el juicio en apelación por la financiación ilegal de su campaña presidencial de 2012.

Esta nueva sentencia, ligeramente reducida respecto a la dictada en primera instancia en septiembre de 2021, constituye un golpe para el político de 69 años, quien ha mantenido firmemente su inocencia desde el inicio del proceso.

El tribunal consideró que Sarkozy había participado en un sistema de falsificación de facturas a través de una empresa llamada Bygmalion, con el objetivo de ocultar los verdaderos gastos de su campaña y así superar los límites legales impuestos.

Aunque en primera instancia no se encontró una conexión directa entre Sarkozy y la trama de falsificación, los jueces consideraron que no podía desconocerla y que, de hecho, había presionado para incrementar los gastos de la campaña, a pesar de las advertencias sobre el límite de gastos.

“Sarkozy es inocente”, afirmó su abogado tras la sentencia, comparando el veredicto con la reciente absolución del exministro François Bayrou por un caso similar de financiación ilegal. Sin embargo, el tribunal consideró que Sarkozy era responsable de la trama, aunque no existieran pruebas directas de su conocimiento de la misma.

El exmandatario, conocido por su estilo combativo, anunció que apelará la sentencia, dejando en suspenso su cumplimiento y demostrando su determinación para probar su inocencia.

Esta condena se suma a otras preocupaciones legales para Sarkozy, incluyendo una sentencia previa por tráfico de influencias y un próximo juicio por la presunta financiación ilegal de su campaña de 2007, así como su presunta implicación en otros casos de corrupción.

El nombre de Sarkozy ha estado en el centro de varias investigaciones, lo que ha ensombrecido su legado político y ha planteado dudas sobre su integridad durante su tiempo en el cargo más alto de Francia.