La escuela barcelonista que lideran cuatro de los ocho técnicos en la UEFA Champions League

De los cuatro técnicos con escuela barcelonista, solo Pep Guardiola y Luis Enrique ya saben lo que es ganar la Champions League

Los cuartos de final de la presente edición de la Champions League tendrán una marcada influencia barcelonista, con cuatro de los ocho técnicos que quedan con vida formados bajo el fuego de la escuela azulgrana. Aunque Pep Guardiola figura como el más exitoso de todos, Luis Enrique, Xavi Hernández y hasta Mikel Arteta profesan muchas de las ideas del equipo catalán.

Aunque el “modelo de juego” suele ser un término ambiguo, cuando se habla del modelo de juego del Barcelona se entiende como aquel que Johan Cruyff instauró en el equipo y que, de alguna forma, perpetuó las ideas de Rinus Michels con la denominada “Naranja Mecánica”. La mezcla de influencias dieron paso a un futbol ofensivo en el que la posesión de la pelota, el constante movimiento de los jugadores y el juego posicional fungen como la base de todo. En el Barcelona adoptaron esa filosofía desde la cantera, ahí, no solo se hacen jugadores, sino también entrenadores.

PEP GUARDIOLA, EL MAESTRO

Con los años, Pep Guardiola se ha convertido en el máximo heredero del futbol total. En su etapa como jugador, el mediocampista aprendió de primera mano los secretos de Johan Cruyff, una posibilidad que le permitió aplicarlos en el banquillo años más tarde. Aunque su etapa con el Barcelona ha sido la más exitosa de su carrera, al ganar 14 títulos en cuatro años, con el Bayern Múnich y con el Manchester City también ha logrado imponer su estilo.

Más allá de que las variantes tácticas en su sistema de juego son constantes, Guardiola no renuncia a la máxima barcelonista, la pelota es la base de todo. “Lo único que proponemos es que estos jugadores tengan el mayor tiempo posible el balón. Cuando el contrario lo tenga, entonces se lo quitamos para recuperarlo y ya a partir de ahí vemos que uso hacemos de él”, dijo en su momento.

LUIS ENRIQUE, EL REBELDE

El asturiano conoció las entrañas del Barcelona como jugador y como técnico, en ambas facetas fue exitoso. Conocido por su carácter férreo, Luis Enrique ha conseguido darle un toque de su personalidad a sus modelos de juego. Como técnico del Barça tuvo el tino de darle verticalidad a un estilo que amenazaba con quedarse obsoleto, lo mismo ha intentado en otros equipos en los que ha estado, como ahora, en el PSG, sin perder, eso sí, su vocación ofensiva y el juego posicional.

La posesión de balón es un medio para conseguir un fin. El fin es ganar los partidos. Si un rival se te encierra y te permite una posesión larga ésta te sirve para generar huecos y hacer goles, si un rival decide darte los espacios y con dos toques puedes hacer gol, pues no tiene ningún sentido tocar el balón”, explicó.

XAVI HERNÁNDEZ, LA PROMESA

Así como Guardiola aprendió de Cruyff, Xavi aprendió de Guardiola. El mediocampista interpretó como pocos las ideas de Pep y en su etapa como futbolista supo plasmarlas magistralmente dentro del campo.

Como técnico, Xavi no entiende otra forma de llegar al éxito más que con el estilo de juego que siempre le ha dado resultado al equipo de su vida. El estratega prioriza la posesión de la pelota y la presión alta, el balón, como punto central.

“Tardaríamos años en ganar de otra manera. Lo que tengo claro es que jugando con este modelo de juego se han conseguido cinco Champions, muchos títulos de Liga y el reconocimiento mundial. Sales fuera de España y todos se acuerdan del Barça de Guardiola y de Messi. Se acuerdan de cómo se jugó, más que de lo que ganamos. Yo no tengo ninguna duda. Es esta la vía. En el Barça no hay otra”, dijo.

MIKEL ARTETA, EL ALUMNO DE PEP GUARDIOLA

Aunque Mikel Arteta solo jugó en las divisiones inferiores del Barcelona, el mediocampista creció con la idea del modelo de juego en la mente. Fue hasta que tomó la decisión de convertirse en técnico que aquella formación tomó relevancia. El español fue asistente de Pep Guardiola en el Manchester City a lo largo de tres temporadas, ahí pudo conocer de primera mano los secretos del sistema y llevarlos a su experiencia con el Arsenal.

“Pasamos mucho tiempo juntos y es un amigo. Formó parte de mi desarrollo como persona al pasar por muchas cosas que viví junto a él. Fue un privilegio y, por supuesto, muchas de las cosas que asumí, que sentí de mi etapa en el Barcelona, las compartimos juntos y muchas cosas las aprendí de su gestión”, dijo.

Fuente: ESTO