Buscan que flor de ciricote sea insignia de Quintana Roo

Tras 20 años, la Asociación Mexicana de Arboricultura la flor de ciricote (Cordia dodecandra A.DC.) busca que la flor sea por decreto representativa de Quintana Roo.

Rafael Reynoso Valdez, presidente de la Asociación Mexicana de Arboricultura en el sureste.

Gracias a la propuesta de los integrantes de la Asociación Mexicana de Arboricultura la flor de ciricote (Cordia dodecandra A.DC.) nativa de la Península de Yucatán y con fuerte presencia en Quintana Roo podría ser elegida como la flor emblema del estado, comentó su presidente en la zona sur Rafael Reynoso Valdez.

Así luce la flor de ciricote.

“La flor del ciricote fue propuesta hace casi 20 años para que fuera la flor representantiva del estado de Quintana Roo por las cualidades que tiene tanto la flor como el arbol del ciricote que se aprovecha todo desde el fruto hasta la hoja que se provecha para lavar los trastes, la madera, entonces es un árbol que abunda y se propuso pero ya no se decretó”, dijo el presidente de la Asociación Mexicana de Arboricultura.

Entre las razones de por qué eligieron esta especie, el arborista explicó que se trata de un árbol que brinda frutos, madera, hojas para lavar y además es una especie que abunda en el estado de Quintana Roo, además dijo que la propuesta data de hace 20 años sin embargo aún no se logra el reconocimiento oficial.  

“Por eso la Asociación Mexicana de Arboricultura esta retomando el tema para que la flor del ciricote como la flor del estado de Quintana Roo”, señaló.

Finalmente comentó que tras 20 años de intentos, actualmente la Asociación Mexicana de Arboricultura está retomando el tema para lograr el decreto que otorgue a la flor del ciricote como la flor del estado de Quintana Roo.

Según la descripción académica, el árbol crece hasta 15 metros de altura, es caducifolio, su copa es redondeada muy densa, tiene hojas simples muy ásperas, flores en panículas en forma de corneta con corola intensamente anaranjada, y florea entre febrero y mayo, con frutos en forma de drupa de hasta 4 cm de largo de color amarillo al madurar.

Los antiguos mayas utilizaban la madera para mobiliario, ebanistería, artesanías y pisos; sus hojas sirven para lijar la suciedad de las jícaras, sus frutos son comestibles en dulce y conservas, la corteza y la madera se utilizan para tratamiento del catarro y es usada frecuentemente como planta de ornato en parques y jardines.

Fuente: La Verdad