Predicciones 2021: ‘señales’ auguran buen año para el campo de Q. Roo

Campesinos afirman que las cabañuelas predicen lluvia abundante para la agricultura y ganadería.

Los mexicanos de antaño diseñaron un método que, a través de la observación y el registro de las lluvias de enero, les permitía determinar cuál sería el clima durante el resto del año; hasta la fecha estas señales (cabañuelas) auguran buen año para la agricultura y ganadería en Quintana Roo.

Ezequiel Solís Castillo, representante campesino de las comunidades establecidas en la zona limítrofe con Campeche, aseguró que considerando las cabañuelas, este 2021 será un año con abundantes lluvias, muy benéfico para el campo, principalmente para los sectores agrícola y pecuario.

Recordó que desde el primero de enero se han presentado lluvias constantes y, de seguir así, hasta el cierre de las cabañuelas; este año se tendrá un buen ciclo de siembra de más de dos mil hectáreas de maíz de temporal en la zona.

Aunque existe un dilema ya que debido al cambio climático las “cabañuelas” se han descontrolado y ya no son tan acertadas como hace 20 años, cuando se cumplía en tiempo y forma este pronosticó anual.

“Hay numerosos testimonios de la efectividad que estas predicciones tenían entre nuestra gente; sin embargo, en estos días se va perdiendo de manera paulatina la costumbre de confiar en tan generosos pronósticos debido al cambio acelerado de usos y costumbres entre las nuevas generaciones”, agregó Solís Castillo.

Pese a esto, explicó que

“están tomando nota de las cabañuelas, nos aprestamos a tener un buen año agrícola, conforme a las predicciones de las cabañuelas vistas en lo que va en este mes de enero, por lo que recomendamos a los campesinos prepararse para un buen temporal en los primeros meses del año.

Hemos tenido abundantes cosechas el año pasado que nos han permitido salir del dolor que nos causó la plaga y sequía del 2019, pasamos hambre y sufrimiento, pero a Diosito gracias, este año ha sido bueno conforme las muestras de los buenos días de enero. Esto hace que confiemos en el tiempo, porque hay años buenos y malos, y todo lo cuentan los almanaques que siguen al pie de la letra lo que hacen y dicen las cabañuelas”.

¿Qué son las cabañuelas y cómo funcionan? 

El sistema llegó a América con los conquistadores españoles. Consistía en predecir el clima de un año en función de lo que ocurría en enero.

Al inicio de cada año los campesinos van apuntando en un cuadernito lo que pasaría en los primeros 12 días del mes, ya que eso se vería en los 12 meses del año. Es decir, si el 1 de enero “pintaba” agua, llovería todo el mes. Al siguiente día, si no llovía, febrero sería mes seco, y así sucesivamente hasta llegar al día 12, que corresponde a diciembre, con la circunstancia de que esta primera predicción tenía una aplicación de 12 horas cada mes.

Luego el 13 comenzaban las “cabañuelas de vuelta”: servían para anunciar lo que sucedería en las otras 12 horas de los 12 meses, pero de forma descendente. Es decir, que se contaba el 13 aplicándolo a diciembre; 14 de enero correspondiente a noviembre y así sucesivamente hasta llegar al 25, que sería enero.

A partir del día 25 hasta el 30 de enero, estaremos hablando del equivalente al clima de cada dos meses. Esto es, el día 25 de enero representan los meses de enero y febrero, el 26 equivale a los meses de marzo y abril, etcétera.

A continuación se toma el día 31 de enero y se divide en intervalos de dos horas en orden descendente. Desde las 12 a las 2 es el mes de diciembre, de las 2 a las 4, el mes de noviembre, y así sucesivamente.

Fuente: Novedades Quintana Roo