¿Qué sucederá cuando Benedicto XVI muera? Así prepara el Vaticano el funeral de un Papa emérito
Aunque no existe un protocolo específico, se espera que el funeral de un Papa emérito se lleve a cabo siguiendo las pautas
El Papa emérito Benedicto XVI, que fue elegido como líder de la Iglesia Católica en 2005, pero renunció en 2013 debido a problemas de salud, se encuentra actualmente en un delicado estado de salud.
El Papa Francisco, quien actualmente ocupa este cargo, ha pedido oración especial por el alemán Joseph Ratzinger, quien está “muy enfermo”, lo que lleva a pensar en cuál sería el escenario si el Papa Benedicto XVI muere en el futuro próximo.
¿Cómo será el funeral del Papa emérito Benedicto XVI?
Un funeral de un Papa emérito es un evento solemne que se lleva a cabo en la Basílica de San Pedro en el Vaticano.
Los funerales de los Papas eméritos suelen ser similares a los funerales de los Papas titulares, con algunas diferencias menores en el protocolo y la ceremonia.
El cuerpo del Papa emérito se coloca en un féretro y se lleva en procesión desde el palacio apostólico hasta la Basílica de San Pedro. A lo largo del camino, el féretro es acompañado por una comitiva de cardenales, obispos y otras autoridades eclesiásticas.
Una vez en la Basílica, el féretro se coloca en el altar principal y se celebra una misa solemne.
Durante la misa, se leen pasajes de la Biblia y se canta el “Réquiem”, una misa de difuntos. El Papa emérito es recordado y se le rinde homenaje durante la ceremonia.
Después de la misa, el féretro es llevado a la Capilla Sixtina, donde se coloca en una cripta debajo de la Basílica de San Pedro. Allí descansará junto a otros Papas eméritos y Papas titulares.
La muerte del Papa emérito Benedicto XVI será el primer caso en la historia moderna de un Papa fallecido y que su funeral será presidido por el Papa en activo, Francisco.
¿Por qué el papa Benedicto XVI es emérito?
De acuerdo con el Vaticano, se le nombra Papa emérito a aquel pontífice de la Iglesia católica, que por voluntad propia, decide renunciar al ministerio Papal, es decir, a su puesto como Papa.
En 1294, Celestino V, un monje que prefería la vida contemplativa, fundador de la Orden de los Celestinos, fue el último en renunciar por voluntad propia hasta que Benedicto lo volvió hacer en 2013.
La palabra emérito significa que pese haberse retirado de su cargo, sigue conservando algunos beneficios en reconocimiento a sus méritos.
Fue el 11 de febrero de 2013 cuando se dio a conocer la renuncia de Benedicto XVI a su pontificado.
Sin embargo, su dimisión se hizo efectiva formalmente el 28 de febrero de 2013, día en que también se despidió de los cardenales en su último día como pontífice y ofreció su incondicional obediencia a quien fuera posteriormente su sucesor.
Fuente: El Sol de México
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